La trama urbana de Hornachuelos es herencia de la ocupación musulmana. Tenemos constancia a través de las fuentes de la existencia de la Madinat Furnuyûlus, según las descripciones del geógrafo al-Idrisi en el s. XII. Del mismo modo, quedan vestigios arquitectónicos que así lo atestiguan: el castillo y el recinto amurallado tienen su origen en época califal (s. X). Es posible que su aparición como núcleo urbano, surgiera por una acumulación de población que, asentada al pie de la actual población, tendría sus huertas junto a las numerosas cuevas que en el arroyo del Barranco de Fiel les servían de habitación, tal y como observamos, también, en la zona del río Retortillo. Por conveniencias defensivas, por desarrollo agrícola o en relación con las comunicaciones con las minas, suponemos que Hornachuelos se asienta, ya como población protegida al Este, por el cauce del Bembézar y al Oeste por el referido barranco. El urbanismo de Hornachuelos en principio hay que considerarlo condicionado por la necesidad defensiva y por el sentir de una sociedad en la que el Islam está presente en cada una de sus parcelas cotidianas. El intricado de calles que se estrechan, calles sin salida y plazuelas que se extienden por el Casco Histórico de Hornachuelos son una muestra de una cultura en la que los espacios privados prevalecen sobre los públicos, ejemplo de una sociedad (Umma) muy celosa de su intimidad. Las calles están pensadas para llegar a las viviendas y no para comunicarse con el exterior, algunas se estrechan sin intención aparente, respondiendo a unas normas de construcción (Fetuas) por las cuales la población musulmana de la época podía agrandar su casas según sus necesidades, restándole incluso terreno a la calle, siempre y cuando no causara ningún perjuicio a los vecinos.
La espina dorsal del Casco Histórico es la calle Mayor, eje que conecta la Plaza de la Constitución donde se encuentra el Ayuntamiento, con los espacios públicos inferiores. En el núcleo urbano de Hornachuelos han predominado las pequeñas casas de población campesina. A diferencia de otros pueblos de la provincia de Córdoba, a pesar de la considerable extensión de su término municipal, sus tierras, en su mayoría ubicadas en los montes y con terrenos de escasa producción no han permitido la concentración de riqueza. Sólo su pertenencia en época Moderna a una rama titulada de la nobleza cordobesa, incluyendo en estas circunstancias, el paso del camino de Córdoba a Sevilla, hacen que se construyan en el s. XVI una serie de edificios para cubrir las necesidades urbanísticas esenciales: posada, mesón, obras pías, hospitales, molinos, pósito y las casas propias de un gobierno municipal. Estas edificaciones llegan hasta ahora, cuando no desaparecidas totalmente, en un estado de transformación o ruina que sólo permite evocar un recuerdo del panorama de una población, escasa de habitantes, con abundantes huertos en espacios pequeños, hasta el siglo XIX. Estas construcciones, unas públicas, como el ayuntamiento y el pósito, otras privadas o de fundaciones pías o de órdenes religiosas, las indicamos a continuación:
Casa de los Caballeros
Construcción del s. XVI, situada en la Calle Béjar. Nº2. Es característica en ella la labor de cantería de la portada, con el despiezo de las dovelas en radiantes vistos. Enmarcada toda la portada por alfiz saliente y el frontis, en cuya dovela central aparece un escudo de armas con la Cruz de la Orden de Alcántara perteneciente al Conde de Belalcázar, casado con Dª. Teresa de Zúñiga, heredera del Ducado de Béjar, de ahí el nombre de la calle.
Casa Nº 3 de la calle de la Palmera
De esta casa se conserva la portada, también del siglo XVI, y exacta a la anterior con despiezo de dovelas sobre radiantes, aunque de pequeñas dimensiones.
Calle Béjar. Nº3
Esta fachada que estimamos del final del siglo XVIII. corresponde a la casa de un hidalgo, como vemos por el escudo de armas en mármol blanco, sobre una portada que hoy es de ladrillo visto y antiguamente estuvo encalada, muy simple, sobre el dintel un pequeño friso saliente y ventana sobre él, con gracioso guardapolvo en la parte superior de ésta, como las demás ventanas del piso alto.
El tipo de patio pequeño también simple y popular, es parecido a otros que se conservan hoy día en la villa, pequeñas dimensiones impuestas por la estructura de calles estrechas y el escaso fondo del solar.
Calle Pedro Acosta, Nº5
En el Catastro de Ensenada aparece con el nombre de Casa de los Vicarios, hoy es una casa de vecinos. Lo más importante que se aprecia, es la estructura del patio con dos plantas de arquerías superpuestas con arcos hoy tapiados, sostenidos por pilastras achaflanadas y octogonales de ladrillos, comunes en las construcciones mudéjares. Esta obra pudiera ser de finales del siglo XVII.
Antigua Posada Calle Mayor, Nº 24.
Este edificio del siglo XVIII se ha conservado en su esencia a lo largo del tiempo. Podemos ver una fotografía del patio interior, correspondiente a la galería cubierta superior que en los antiguos mesones estaba dedicada a las habitaciones de los huéspedes, mientras en la galería baja situaban las cuadras y servicios. El Duque de Rivas, en su obra dramática «Don Álvaro o la Fuerza del Sino», situó en él una de sus escenas. Siendo un edificio de arquitectura popular que merece conservarse, ya que es uno de los que presenta más encanto popular por su simple funcionalismo, sus patios, galerías y distribución, por medio de arcos de medio punto. Su entrada a través de una portada con dintel plano, coronado en la parte superior por una fila horizontal de preciosos azulejos del siglo XVIII., que da a una primera crujía de dos plantas, con simple artesonado de vigas redondas, y a un patio que hoy constituye un rincón excepcional, pues conserva el antiguo pavimento de chinos y ladrillos, simples bancos de mampostería y bella estampa de arcos de cal hasta el suelo.
Nota: en la actualidad se encuentra en rehabilitación. Las obras de adecuación han puesto al descubierto diversos grafitis en color almagra aparecidos en la fachada, propios de la época Moderna.
Escalinata en la Puerta de la Villa, actual Calle Doctor Fleming.
La Escalinata da acceso a un grupo de casas, que hoy día se conserva en la calle Doctor Fleming, junto al Ayuntamiento. Sin embargo, en tiempos de Casas-Deza el lugar que ocupan dichas casas era denominado “el solar de los Condes”, correspondiente a una edificación derribada donde se ubicaba la Casa de los Condes de Hornachuelos, ya hecha huerto en la época del autor citado.
Escuela Victoria Díez
En la Avenida Pío XII. Sin ser arquitectura tradicional, tiene una fábrica muy cuidada, fechada en la primera mitad del s. XX.
Calle La Palma
Aparecen incluidas en el Catálogo de la Delegación de Cultura, como viviendas de los siglos XVIII y XIX, las casas nº 16 y nº 31. La primera de ellas conserva su fachada original en su parte posterior, la que da al Barranco de Caño de Hierro.
Ayuntamiento
Edificio de finales del siglo XIX y primeros del siglo actual, reformado en el año 1985. Se cree que fue la casa solariega de los Condes de Hornachuelos.
Constructivamente es un edificio de dos plantas, con muros de carga sobre los que se apoyan, en planta baja, de manera inusual, bóvedas de arista, y en la planta alta son forjados planos. La fachada es un equilibrado conjunto de dos plantas y torre de reloj. Dentro de su clásica composición simétrica se ha remarcado su elemento central, que es una portada a modo de frontón partido sobre la que se sitúa el balcón principal coronado por el escudo de Armas de la Villa y la Torre del Reloj, que se remata con campana.
Casa de la familia Gamero-Cívico
Casa señorial de finales del siglo XVIII, de estilo modernista situada en la Plaza de la Constitución. Se mantiene en el mismo estado. Es interesante su visita como ejemplo de vivienda de terrateniente de la zona. Durante la Guerra Civil Española fue utilizada como cárcel. El 11 de agosto de 1936 fue encarcelada en ella Victoria Díez.
Grupo Escolar José Palencia
La Escuela del Paseo, hoy Casa de la Cultura, es de estilo artístico ecléctico, es decir, que toma elementos de varios estilos. No se sabe si fue el mismo arquitecto que hizo el cementerio, aunque pudiera serlo. Esta escuela se construyó a principios del siglo XX y se inauguró el 17 de febrero de 1908 por los reyes, Alfonso XIII y María Eugenia de Battenberg, y constaba de 2 casas, habitación con jardín y dos aulas, una para niñas.
En 1938 o 1939, siendo alcalde don Fernando Herrera, le dieron al grupo escolar el nombre de don José Palencia Muñoz.
Cementerio
Este cementerio sustituyó en 1888 al parroquial que fue construido en La obra corrió a cargo de D. Juan Felipe Vilela, siendo terminada por D. Rafael de Castro González en 1889, año en que fue bendecido. Se trata de un edificio de un funcionalismo apreciable, en que se conjugan una simplicidad de líneas en la fachada, con dos edificios laterales y la capilla como cuerpo principal en medio. La capilla, construida de ladrillo visto en su fachada a principios del siglo XX, combina influencias neoclásicas con el estilo neo-románico. Es de una sola nave, con tejado a dos aguas, sin adornos de ningún género en el interior, y sólo destaca la bella presencia y el buen trazo de dibujo de este frontis que lateralmente está delimitado por dos señaladas pilastras, rematados por jarrones de cerámica y un piñón sobre el óculo; y un arco de medio punto moldurado que cobija el dintel en línea quebrada y un tímpano.
Bibliografía:
- ACIÉN ALMANSA, M. y VALLEJO TRIANO, A. (1998). “Urbanismo y Estado islámico: de Corduba a Qurtuba-Madinat al- Zahra” en P. Cressier y M. García-Arenal, Genèse de la ville islamique en al-Andalus et au Maghreb occidental . 107-136.
- Ayuntamiento de Hornachuelos. Concejalía de Cultura. Reseña BLANCO Y NEGRO del 22/02/1908, publican varias fotografías de la llegada de la reina a Moratalla y la visita a Hornachuelos con motivo de inaugurar el Grupo Escolar José Palencia.
- Catálogo General de Patrimonio Histórico Andaluz. http://www.juntadeandalucia.es/organismos/cultura/areas/bienes- culturales/catalogo-pha/consulta.html
- FRANCISCO DE ASIS (1994). “Tus calles”. Revista HORNACHUELOS, nº 13. Hornachuelos.
- ORTIZ JUÁREZ, D., BERNIER LUQUE, J, NIETO, M., y LARA ARREBOLA, F. (1986). Catálogo Artístico y Monumental de la Provincia de Córdoba. Tomo IV, Fuente Obejuna- Hornachuelos. Córdoba.
- RAMÍREZ DE LAS CASAS-DEZA, L.M. (1840-1842), Corografía histórico-estadística de la provincia y obispado de Córdoba, Vol. I.